
¡Qué pena! No he podido llegar a tiempo para ver todo el programa de Luís Bassat, y sólo me he quedado en el final.
Del escaso contenido que he podido ver, sólo he sacado tres conclusiones: lo importante no es vender, sino obtener beneficios en la venta (una buena gestión de venta de nada sirve si consideramos la empresa como una ONG); es necesario llevar a cabo una buena gestión de liderazgo, y eso también implica comunicación para evitar errores y precipitaciones de los delegados; por último, en las empresas hace falta valores precisamente como el de la persona despedida. Quizá su competitividad no sea la más brillante, pero es algo que sólo ha sido puntual.
He visto muy poco, como he dicho. Y entiendo que se trata de un programa que representa la dura competencia en los mercados, simbolizando que una decisión puede llevar al traste una operación importante poniendo en peligro la organización. No obstante, los caracteres de sinceridad y honestidad que han podido observarse, por encima de la competitividad, también son necesarios en todas las empresas (y esto es algo que me recuerda a uno de los últimos artículos de Pablo Rodríguez en su blog “Economía Sencilla”).
Porque quizá un aspecto importante en las empresas es la reubicación de las personas. Juzgamos a las personas por su capacidad en un puesto concreto, sin tener en cuenta que desempeñarían una excelente función en otro. Pretendemos la excelencia en sus resultados sin apercibirnos de que sus características responden mucho mejor a otras necesidades de la empresa… pero las cosas son así, están como están y –de momento- funcionan. No obstante, esto es algo que hemos acordado anteriormente como susceptible de mejora, ¿verdad?
No, no estoy criticando nada que tenga que ver con el programa. Me parecen más interesantes las conclusiones que todos podamos sacar que el hecho de cuestionar las decisiones de la productora o del Sr. Bassat. Podemos estar de acuerdo o no, pero –como el mismo Sr. Bassat ha dicho- en una empresa hay que tomar decisiones, asumiendo riesgos. Y cada uno tiene sus propias visiones, de modo que actúa según ellas. Ni mejor, ni peor.
Este es un artículo cortito, incluso diría que de contenido “light”. No obstante, yo voy a tratar de seguir el programa “El Aprendiz”, en La Sexta, para tratar de sacar conclusiones en lo que se refiere a distintos modelos de gestión de una empresa. ¿Se animan a que vayamos comentando? ¡Ahí es donde radicarán los contenidos más interesantes, seguro!